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¿Te has preguntado por qué el hígado es tan importante? Aquí te lo explicamos

Persona pensativa con uniforme médico, acompañada del texto '¿Te has preguntado por qué el hígado es tan importante? Aquí te lo explicamos.' y un ícono de hígado en la parte inferior.

El hígado es uno de los órganos más importantes y complejos del cuerpo humano, y aunque no siempre le prestamos la atención que merece, cumple funciones esenciales para mantenernos saludables. En esta ocasión, queremos explicarte su papel fundamental en el organismo, las enfermedades hepáticas más comunes, las formas de prevenirlas y los exámenes de laboratorio clave para monitorear su estado.

¿Por qué es tan importante el hígado?

Ubicado en la parte superior derecha del abdomen, el hígado es el órgano interno más grande del cuerpo. Funciona como una especie de "central química", responsable de regular y procesar diferentes sustancias, como nutrientes, vitaminas y hormonas, necesarias para nuestra salud. Entre sus funciones más destacadas, podemos señalar:

  1. Metabolismo de nutrientes: El hígado transforma los nutrientes de los alimentos en sustancias útiles para el cuerpo, como glucosa, proteínas y lípidos.
  2. Detoxificación: Actúa como un filtro natural que elimina toxinas y compuestos perjudiciales que provienen de alimentos, medicamentos, alcohol y productos químicos.
  3. Almacenamiento de vitaminas y minerales: El hígado acumula vitaminas (A, D, E, K y B12) y minerales como el hierro y el cobre, liberándolos cuando el cuerpo los necesita.
  4. Producción de bilis: La bilis, una sustancia producida en el hígado y almacenada en la vesícula biliar, facilita la digestión y absorción de grasas en el intestino.
  5. Regulación de glucosa en sangre: El hígado almacena glucógeno, que luego convierte en glucosa cuando el cuerpo requiere energía extra, ayudando a mantener equilibrados los niveles de azúcar en sangre.

¿Cuáles son las implicaciones de la salud del hígado en el bienestar general?

Al cumplir tantas funciones importantes, el hígado juega un rol crucial en nuestra salud general. Un hígado sano permite que el cuerpo metabolice nutrientes, elimine toxinas y mantenga el equilibrio de muchas funciones vitales. Sin embargo, cuando el hígado se ve afectado, pueden presentarse síntomas como fatiga, problemas digestivos y dificultades para combatir infecciones. Mantener un hígado saludable es fundamental para una buena calidad de vida.

¿Cuáles son las principales enfermedades hepáticas?

Existen diversas afecciones que pueden comprometer la función hepática. Entre las más comunes se encuentran:

  1. Hepatitis: Inflamación del hígado causada por virus (hepatitis A, B o C), abuso de alcohol o consumo excesivo de medicamentos.
  2. Hígado graso (esteatosis hepática): Acumulación de grasa en el hígado. Puede ser de origen alcohólico o no alcohólico, este último asociado a la obesidad y la diabetes tipo 2.
  3. Cirrosis: Cicatrización del tejido hepático como resultado de daño crónico, frecuentemente causado por hepatitis crónica o consumo prolongado de alcohol. La cirrosis afecta gravemente la capacidad del hígado para cumplir sus funciones.
  4. Cáncer de hígado: Puede surgir como consecuencia de enfermedades hepáticas crónicas, especialmente en casos de cirrosis y hepatitis.
  5. Insuficiencia hepática: Cuando el hígado pierde la capacidad de funcionar correctamente. Puede suceder de forma aguda (repentina) o crónica (progresiva).

Claves para la prevención de enfermedades hepáticas:

La mayoría de las enfermedades hepáticas pueden prevenirse mediante hábitos saludables, como:

  1. Adopta una dieta equilibrada: Elige alimentos ricos en fibra, como frutas, verduras y granos integrales. Limita el consumo de grasas saturadas, azúcares y alimentos procesados que sobrecargan al hígado.
  2. Mantén un peso saludable: El sobrepeso y la obesidad son factores de riesgo para el hígado graso. Ejercítate regularmente y sigue una dieta equilibrada para promover su correcto funcionamiento.
  3. Evita el consumo de alcohol: El alcohol es una de las principales causas de daño hepático. Si decides beber, hazlo de manera moderada para proteger tu hígado.
  4. Vacúnate contra la hepatitis: Las vacunas contra la hepatitis A y B son eficaces para prevenir infecciones virales que pueden afectar el hígado.
  5. Evita el uso innecesario de medicamentos y sustancias químicas: Algunos fármacos y productos tóxicos pueden dañar el hígado si se consumen en exceso. Sigue siempre las indicaciones médicas y evita el uso indebido de medicamentos.

Complementa tus hábitos saludables con el chequeo adecuado:

Realizarte exámenes de laboratorio periódicos te permite detectar problemas hepáticos en sus etapas iniciales, incluso antes de que aparezcan síntomas visibles. En el Laboratorio Médico Echavarría, contamos con el Chequeo Vital Función Hepática, un conjunto de pruebas diseñadas para evaluar el funcionamiento del hígado y detectar anomalías a tiempo. Este chequeo incluye:

  • Bilirrubinas total y directa: Evalúan el nivel de bilirrubina, un producto de la descomposición de glóbulos rojos, que se eleva en casos de enfermedad hepática.
  • Aspartato aminotransferasa (AST) y Alanina aminotransferasa (ALT): Enzimas hepáticas que aumentan cuando el hígado está dañado o inflamado.
  • Fosfatasa alcalina: Enzima que, cuando está elevada, puede indicar problemas en el hígado o en los conductos biliares.
  • Gamma-glutamil transferasa (GGT): Indicador de daño hepático, especialmente en casos de abuso de alcohol o consumo de medicamentos.
  • Deshidrogenasa láctica (LDH): Enzima que puede reflejar daño hepático o tejido afectado.
  • Hemograma IV (método automático): Ayuda a identificar anemia o infecciones, que son comunes en enfermedades hepáticas.
  • Tiempo de tromboplastina parcial activado (PTTA) y Tiempo de protrombina (PT): Miden la capacidad de coagulación de la sangre, afectada en personas con problemas hepáticos.

Protege tu hígado para una vida feliz y saludable.

El hígado es un órgano esencial para mantener el equilibrio de múltiples procesos en el cuerpo. Mantenerlo sano es clave para una buena calidad de vida y para prevenir enfermedades graves. Adoptar un estilo de vida saludable, evitar factores de riesgo y realizar exámenes de laboratorio de forma regular son pasos fundamentales para asegurar su correcto funcionamiento. En el Laboratorio Médico Echavarría, estamos comprometidos con tu salud hepática y te ofrecemos servicios de diagnóstico confiables para cuidar de tu bienestar.